Esta pieza clave que le da inicio a cada jornada de espectáculos en el escenario mayor del Norguss Jacob, volvió a emocionar a las miles de personas que se encuentran en cada una de las jornadas.
Siempre con la connotación de la inmigración, el sufrimiento vivido por los inmigrantes al dejar su tierra para buscar un nuevo futuro, como argumento central, este año el Cuadro de Apertura volvió a emocionar, la gente lo espera y responde con aplausos de pie.
Matías Hultgren, director general de la obra, manifestó que «estamos muy contentos con los resultados obtenidos hasta el momento con el cuadro de apertura», al tiempo que explicó «montar una obra surge de la inspiración, y este año esa inspiración surgió de unas cartas que fui recibiendo de parte de abuelos y tatarabuelos y en esa letra fina, con palabras claves, era la mirada inmigrante de cuando llegaron a Oberá». Hultgren afirmó «podemos decir que estas cartas me encontraron, fue repentino, las empecé a leer y esto nos llevó a encontrar otras cartas de otras familias y todas tenían un factor común, con frases tales como: espero que al recibir estar carta yo ya esté en un lugar mejor».
La obra está compuesta por 135 personas, con el plus de que este año sumaron músicos del Centro Polivalente de Arte que tocan en vivo, con bailarines de primer nivel del Instituto Superior del Profesorado de Arte (ISPAO). Cuenta con la colaboración y coordinación del ballet Agitando Pañuelos – también dirigido por Matías Hultgren – y la asistencia coreográfica de Rocío Celeste Núñez. «Tenemos que agradecer de manera inmensa, el aporte de las colectividades desde sus presidentes y directores de ballets por mandar a sus bailarines, con los que se ha formado un grupo hermoso». La obra también contó con la colaboración del Profesor Agustín Cardozo en la Dirección Musical.
Otro de los factores que se destacan en este cuadro de apertura tiene que ver con una cuestión generacional muy marcada, algo que se puede evidenciar no solo a lo largo de la obra, sino también en la Fiesta toda. Y en ese sentido, otro factor «es el compromiso extremo cuando la Fiesta te llama, porque más allá de que tiene una raíz histórica, convoca a mayores, juveniles e infantiles, todos pensando en sostener este cuadro de apertura durante las diez noches».
El Cuadro de Apertura dura 30 minutos, dividido en 6 escenas, donde el espectador podrá recorrer todos sus aspectos. Otro factor indicativo es el propio arte, «quisimos mostrar cómo el arte sostuvo al inmigrante»,afirmó el director. Finalmente, el factor preponderante es la emotividad que genera. De fondo, se escuchan las voces de inmigrantes leyendo esas cartas en su idioma original. Se puede sentir esa emoción y si usted tiene la oportunidad de presenciarlo, seguramente a su lado habrá alguien a quien, en ese momento, se le escape una lágrima.